Todos buscamos dar un cuidado especial a nuestras uñas para mostrarlas con una buena estética. Sin embargo, la apariencia de las uñas puede ir mucho más allá, ya que son capaces de advertir de si hay algo que no funciona bien en nuestro interior. Es decir, las uñas son órganos que envían señales que pueden ser muy reveladoras a cerca de nuestro estado de salud y que no debemos pasar por alto. Las variaciones del aspecto de nuestras uñas, como los cambios de forma, del crecimiento e incluso del color, pueden ayudarnos a diagnosticar trastornos de salud.
Algunos no tienen mayor importancia, pero es conveniente saber qué puede significar cada uno de ellos. Es importante observar habitualmente la apariencia de nuestras uñas en busca de anomalías o alteraciones que puedan alertar sobre problemas internos de salud. Vemos a continuación 21 señales que podemos detectar mirándonos las uñas y qué significan.
21. Uñas gruesas
Al contrario de lo que puede parecer, aunque las uñas gruesas den sensación de mayor fuerza, este engrosamiento no es normal. Cuando las uñas cambian su aspecto y se vuelven más gruesas e incluso difíciles cortar pueden indicar alguna enfermedad: si siempre han sido normales y se vuelven gruesas de repente, puede indicar un problema de origen pulmonar. Si son gruesas y quebradizas, puede tratarse de psoriasis o tiroides. Por otra parte, además de gruesas, las uñas se vuelven rugosas pueden denotar hongos; existen cómodos cómodamente desde casa. Además, el grosor de las uñas puede indicar problemas de circulación.